La coronación de Carlos III deja patente el duro contraste en la familia real. Por un lado, el príncipe William que es admirado y tiene mucho arrastre. Por el otro Harry, a quien nadie se quiere acercar.
Dicen que quizá tenga que juntarse en la coronación con Jill Biden o con la mujer que fue su nana para no sentirse solo.
Es un reporte de Marco Morales para Hechos.