Este sábado se registraron más de 100 muertos, incluidos niños de menos de cinco años, durante las protestas a favor de la democracia en Myanmar. Con esto, la jornada se convirtió en la más sangrienta desde el golpe de Estado del pasado 1 de febrero liderado por el jefe del Ejército y de la junta militar, Min Aung Hlaing, quien este domingo presidió un desfile castrense con motivo del Día de las Fuerzas Armadas en la capital Naipiyidó.
Las muertes se registraron durante manifestaciones en unas cuarenta ciudades en regiones y estados como Rangún, Mandalay, Sagaing, Bago, Magwe, Tanintharyi y Kachin, según el recuento de Myanmar Now. La cifra total de víctimas mortales, que hasta ayer ascendía a al menos 328, superaría ya los 400 fallecidos.
La advertencia se ha materializado este sábado, en una de las jornadas de represión más feroces hasta la fecha contra los participantes en las protestas convocadas en al menos 40 ciudades de Myanmar, con más de 110 muertos
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— EL PAÍS América (@elpais_america) March 28, 2021
